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Chile
21 de Enero de 2011.- "Hemos venido para quedarnos". Así de categórico fue el gerente general del principal grupo constructor peruano, Graña y Montero, Mario Alvarado, quien reveló que en los próximos cinco años invertirán US$ 1.000 millones. De este monto, US$ 200 millones serán destinados a Chile, principalmente en los sectores energía, minería y concesiones de obras públicas, a los cuales se sumaría el inmobiliario.
Coincidiendo con la visita a Santiago del presidente peruano Alan García, Alvarado llegó a Chile el martes para concretar la primera inversión del conglomerado en nuestro país: la compra por US$ 20 millones de la Compañía Americana de Multiservicios (CAM), filial del grupo Enersis. Esa empresa, con ingresos por US$ 300 millones anuales y que opera en Chile, Perú, Colombia, Brasil y Argentina, desarrolla actividades en el sector eléctrico, tal como la construcción de líneas y subestaciones.
En CAM serán socios con el empresario chileno Manuel Santa Cruz López, del grupo que lleva como nombre su apellido.
El paso más adelantado que lleva en Chile Graña y Montero, es la opción de compra del 80% de la empresa de servicios mineros Marineer, ubicada en Iquique y cuya propiedad está ligada a la familia Vivaldi. Alvarado comentó que esa firma tiene activos por US$ 50 millones y que aún no definen el monto de la adquisición, pues ello depende del resultado del due diligence que están realizando.
El grupo peruano ya ha trabajado en nuestro país en obras como un túnel en el proyecto hidroeléctrico Ralco y la ampliación del Sheraton San Cristóbal. Pero Alvarado explicó que en adelante realizarán inversiones por cuenta propia, en el marco del proceso de internacionalización de la compañía, y que buscarán hacerlo también de la mano de socios locales.
En el sector de las concesiones, por ejemplo, recordó que están precalificados junto a la firma chilena Bitumix (de asfaltos) en la licitación de la red vial de Coquimbo, proyecto del Ministerio de Obras Públicas por US$ 250 millones. La iniciativa involucra obras de mejoramiento en 468 kilómetros de caminos pavimentados. Ésta prevé ser concesionada el primer semestre de este año.
Alvarado señaló que en Perú operan 4.400 kilómetros de carreteras y trabajan en algunos proyectos con la constructora chilena Besalco, ligada a la familia Bezanilla. Ambas firmas coinciden en la concesionaria Norvial, donde la nacional está a través de su filial peruana Besco.
Agregó que han seguido los anuncios del MOP de licitaciones de hospitales y cárceles, aunque aún no toman una decisión respecto de ir por una nueva iniciativa.
Aunque el máximo ejecutivo de Graña y Montero admitió que en Chile "podemos aportar más en construcción industrial, no está descartado el tema inmobiliario". Consultado respecto de si podría ingresar al proyecto Urbanya del grupo Santa Cruz en Pudahuel por US$ 1.400 millones a 30 años con la construcción de 17.500 viviendas, Alvarado admitió que lo conoce, pero dijo que no es su objetivo actualmente.
Con Manuel Santa Cruz la constructora ha incursionado en proyectos inmobiliarios en Perú y son socios en una iniciativa al sur de Lima, en la que pretenden desarrollar una ciudad satélite en un terreno de mil hectáreas.
Visión del país "Chile es muy competitivo, es un ejemplo. Lo estudiamos desde hace 12 años", indicó Alvarado. Obras por US$ 1.700 millones en carpeta Graña y Montero (GyM), la principal empresa del sector ingeniería e infraestructura de Perú, tiene una lista de proyectos por desarrollar por US$ 1.700 millones.
El grupo, fundado en 1933 y presidido actualmente por José Graña Miró Quesada, vendió el año pasado US$ 920 millones, lo que significó un aumento de 22% respecto de 2009.
La compañía es la única de su rubro que cotiza en la Bolsa de Valores de Lima. Está dividida básicamente en las áreas de tecnología e información, ingeniería de consulta, servicios petroleros, desarrollo inmobiliario, construcción y mantenimiento y operación de carreteras.
A la vez, cuenta con 1.800 ingenieros y un total de 15 mil colaboradores.
Para dirigir sus actividades en Chile designó a Antonio Cueto como gerente en nuestro país.
En Perú, en tanto, está construyendo el tren eléctrico de Lima y el Hotel Westin, que será el edificio más alto de ese país con 36 pisos de altura. También está desarrollando la Mina Pueblo Viejo en República Dominicana (de la minera canadiense Barrick) y supervisa el proyecto Costa Esmeralda Resort, ubicado en Riviera Maya, México.
Las constructoras e inmobiliarias chilenas que han conquistado el mercado peruano
El ingreso de constructoras de Perú a Chile es poco habitual, pero la presencia de firmas nacionales en ese país es algo que lleva más tiempo.
Hoy, al menos diez empresas chilenas constructoras e inmobiliarias están en esa nación. Se trata de SalfaCorp, Besalco, Inarco, Tecsa, Paz Corp, Brotec, Mas Errázuriz, Sigdo Koppers, Cypco e Imagina.
Según fuentes del sector , las ventas en conjunto de las ocho primeras compañías superarían ampliamente los US$ 500 millones anuales. A la vez, darían empleo a cerca de 10 mil personas en ese país, sin contar los que trabajan como obreros para proyectos puntuales.
De todos modos, la participación que las nacionales tendrían en la industria peruana, especialmente en el rubro inmobiliario, no sería mayoritaria, pues la inversión local es la dominante (HidrocarburosBolivia.com).
Portal Minero